- Su verticalidad, altura y esbeltez debido a la ligereza estructural
TIPOLOGIA
PERIODOS
Tambien se utiliza la planta de salón o basilical. La planta carece de crucero de brazos salientes (aunque no deja de ostentarse más o menos la simbólica cruz de enmedio). Posee, como mínimo, tres naves y por consiguiente, un sistema de iluminación lateral. Los espacios interiores son amplios y desahogados, abarcables con una sola mirada y tremendamente unitarios, de ahí que parezcan o tengan el aspecto de un gran salón.
En el alzado de la catedral se distinguen tres partes: la arquería, el triforio y el claristorio o ventanales. El muro tiende a desaparecer, sobre todo en lo alto. El triforio es estrecho, ya que pierde su función de tribuna, y se emplea sólo para que pase la luz al interior.
La bóveda de crucería, también llamada bóveda nervada, es un tipo de bóveda característico de la arquitectura gótica que recibe este nombre porque está conformada por el cruce, o intersección, de dos bóvedas. A diferencia de la bóveda de arista, la de crucería se caracteriza por estar reforzada por dos o más nervios diagonales que se cruzan en la clave, generalmente. La bóveda de crucería se considera uno de los tres elementos distintivos de la arquitectura gótica, junto con el arco apuntado y el arbotante.
La bóveda de crucería consta de dos elementos: los arcos que constituyen su armazón, o esqueleto, y los paños o plementos que cubren los espacios intermedios entre los arcos. Primero se levantan los arcos, creando una estructura esbelta, resistente y ligera, y posteriormente se rellenan los paños intermedios conformando las bóvedas, quedando enmarcadas transversalmente por los arcos perpiaños o torales, y longitudinalmente por los arcos formeros, paralelos al eje de la nave que delimitan los tramos de la bóveda.
La boveda mas sencilla es la cuatripartita o de cruceria simple, pero al evolucionar el Gótico se emplean otros tipos de bóvedas más complejas y decorativas (sexpartitas, reticulada, de terceletes, estrelladas o de abanico.de terceletes, estrelladas, de abanico o palmeadas).
Sobre la union de los contrafuertes y los arbotantes se colocaban pináculos para que tengan más peso y resistencia, logrando así con estos remates el doble fin constructivo y estético.
Las puertas y ventanas de las construcciones góticas, también emplean generalmente en su conformación este tipo de arco.
Las puertas góticas son abocinadas, como las románicas, pero el tímpano suele estar dividido en varias franjas horizontales. La ornamentación gótica de las arquivoltas, que suelen ser mas numerosas que en el románico, por medio de escultura se dispone en el sentido de su curva. Tanto las escultura de las arquivoltas como las de las jambas suelen protegerse con doseletes y colocarse sobre pedestales. La forma apuntada de la portada gótica acostumbra completarse con el gablete o moldura angular que le sirve de coronamiento. Las portadas más suntuosas llevan imágenes de apóstoles y de otros santos en las columnillas y a menudo, también otras menores entre las arquivoltas. La portada suele estar dividido por un parteluz que sirve de apoyo a una estatua.
Ventanas y vidrieras
El muro gotico ya no es elemento estructural de sostén de la cubierta y queda relegado a elemento de cierre del edificio y soporte de elementos decorativos, principalmente las ventanas, vidrieras y rosetones.
Los artistas de la época pudieron dar rienda suelta a su imaginación creando un arte desconocido hasta la fecha.
Las ventanas del periodo de transición suelen ser como las románicas de arco apuntado. Pero luego se ostenta el verdadero ventanal gótico amplio y decorado en su parte superior con hermosos calados de piedra, los cuales se forman de rosetoncillos combinados, siempre sostenidos por columnillas o parteluces. En el siglo XIV se complica la tracería multiplicándose los rosetoncillos y adelantando ya el XV se combinan las líneas formando curvas serpenteantes constituyendo el calado flamígero.
Ventanas y rosetones suelen cerrarse con magníficas vidrieras polícromas e historiadas donde a su modo se ejercita el arte pictórico monumental ya que apenas le dejan espacio para su desarrollo los escasos lienzos de pared que median entre los referidos vanos en las iglesias suntuosas. Pero en las más humildes se sustituyen las vidrieras por láminas de piedra translúcida y aun tal vez por encerados.
Durante el periodo gótico medieval los artesanos utilizaban pequeños fragmentos de vidrio tintados con anterioridad. Siguiendo un modelo original, creaban con ellos imágenes y escenas, generalmente, de temática religiosa. Una vez habían visionado la apariencia final, utilizaban tiras de plomo para unir los pequeños cristales. Formaban verdaderas redes con este metal, lo que recibía el nombre de emplomado o emplomadura. Las figuras principales y el contorno de la vidriera se rodeaban con hilos de plomo de mayor grosor, creando así la armadura que protegería el trabajo final una vez colocado.
La vidriera final debía soportar los golpes de viento, las inclemencias del tiempo, y el peso de las grandes bóvedas propias de las catedrales góticas. Con el paso de los años, las técnicas arquitectónicas se fueron mejorando y los vidrios que componían los dibujos tuvieron mayor tamaño.
Al igual que el románico italiano, el lenguaje arquitectónico gótico empleado en otras regiones europeas apenas tiene éxito en Italia.
Frecuentemente se rechazan las innovaciones técnicas y estéticas del gótico europeo, de tal manera que frecuentemente se rechaza el arco apuntado y se sigue empleando el de medio punto.
También es frecuente preferir el uso de la columna al pilar.Hay una tendencia a la horizontalidad, con edificios que no tienen arbotantes. Son espacios desahogados con moderada luminosidad como consecuencia de tener menos vidrieras que en le resto del gótico.
Las torres se separan de la construcción.
Las fachadas ocupan casi todo el exterior, ocultando toda la estructura interna.
Otra de las características del gótico en Italia es que los exteriores de los edificios presentan policromía.
De todo ello se desprende que hay una clara persistencia de la antigüedad clásica, oponiéndose a los estilos medievales.
Catedral de Siena
Palacio Público de Siena
Duomo de Florencia
Santa Croce de Florencia
Santa Maria Novella - Florencia
Palacio Vecchio y Loggia dei lanci - Florencia